Desde el ellx, elle, todes o todxs, el uso de este este lenguaje busca transformar la perspectiva con la que nos referimos hacia personas o grupos particulares.

El marketing inclusivo se basa en la premisa, de que toda marca, a través de su contenido y oferta de productos y servicios, represente la diversidad de su audiencia.

El mensaje de una marca debe ser resonante y estar dirigido a todas las personas, sin importar raza, color, género, edad, origen, orientación sexual, religión, etc.

Hoy más que nunca, los negocios tienen la responsabilidad de ir más allá de las ventas y tomar posición para lograr un cambio en el mundo.

El debate sobre el uso del lenguaje inclusivo sigue alrededor del mundo, no solo en el idioma español, recientemente en Francia decidieron decirle «NO».

Pues para el ministro de Educación de Francia, Jean-Michel Blanquer, este constituye un obstáculo para el aprendizaje de los alumnos y no debe utilizarse como alternativa para “feminizar” la lengua.

A pesar de ello, en redes sociales son cada vez más las personas que apuestan por incluir esta nueva forma de comunicarnos a sus mensajes, desde algunos políticos o celebridades, hasta los internautas en plataformas como TikTok o Instagram.

Las marcas y el lenguaje inclusivo

Los esfuerzos de marketing de una compañía, deben ser multiculturales, y esto no como parte de una moda o tendencia, sino como una cultura que debe mantenerse y tomarse en cuenta, para crear nuevas propuestas e iniciativas, tanto a nivel de producción, como a nivel social.

Acercamiento a un target joven 

La Generación Z, en 2015 fue definida como la de aquellas personas nacidas entre mediados de la década de 1990 y principios de la década de 2000 y que constituyen el 25 por ciento de la población de Estados Unidos.

Si tu intención o la de marca es acercarse a este público, las posibilidades de ampliar el panorama y mostrarse como una empresa innovadora son mayores cuando implementas tendencias que siguen los potenciales consumidores.

Paso a la diversidad 

La lucha porque los derechos de todas, todos y todes es cada vez mayor, por lo que las personas buscan que se reconozcan haciéndolo visible desde el lenguaje, pues con el paso el tiempo la lengua se sigue transformando para poder adaptarse a las nuevas necesidades y movimientos sociales.

Más formas de representar la inclusión

No solo el lenguaje inclusivo puede formar parte de nuevas o futuras campañas o productos, el lenguaje de señas u alguna otra lengua para mostrar la diversidad con la que tu producto o marca se adapta a las necesidades de diferentes sectores de la población.

Además de las palabras, los emojis se han convertido en parte fundamental de la comunicación, por lo que hacer uso de emoticones amarillos cuando te refieras a diversos grupos étnicos.

Incluso utilizar las variaciones de los colores, pueden ser una forma de representar de manera más amplia a la audiencia.

No es un lenguaje para todos 

Este nueva forma de comunicarnos aún no es bien recibida por todos, por lo que es importante conocer a tu audiencia, las tendencias que siguen y si sus ideales comparten la importancia de nombrar a “todes” dentro de su agenda.

Para evitar que la implementación de esta manera de expresarnos afecte tu producto o servicio.

Lo importante es recordar que este tipo de lenguaje no debe ser una imposición, pero puede ser una buena opción para abarcar a nuevas generaciones, atraer a nuevos nichos y llamar la atención de los consumidores, así como de la competencia.

Fuente: merca20

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