Volverte millonario es un tema tabú, hay muchas definiciones de lo que significa ser rico. 

Ser millonario es más un estado mental que una cantidad de dinero en el banco. La realidad es que el rico puede ser pobre y el pobre puede ser rico.

Hoy se habla mucho sobre los secretos o los atajos para crear riqueza, pero rara vez se explora el camino completo que nos lleva a ella. Y aunque es un concepto que pareciera complejo, en realidad la creación de riqueza es más simple de lo que parece.

Hay muchas preguntas que se nos vienen a la mente, ¿Cómo definir a la riqueza? Se es rico según quién o con base en qué, ¿por tener 100 mil en tu cuenta o un millón?, ¿hablamos de dólares?, ¿pesos? Para cada persona el concepto de riqueza puede ser muy distinto.

La riqueza es generar ingresos pasivos que sean mayores al gasto.

  • El ingreso pasivo se refiere al ingreso que generas sin tener que trabajar; aquel que se produce mientras estás realizando otras actividades o dicho de forma coloquial, el ingreso que generas mientras duermes. 
  • El gasto se refiere a todos los egresos que tenemos.

¿Cómo generamos este ingreso pasivo? 

De nuevo dos respuestas simples y contundentes: con dinero y empleando gente.

Históricamente estos dos conceptos han sido las fuentes de riqueza de la humanidad y, hasta la fecha, siguen siendo fundamentales en nuestro sistema económico.

¿Por qué? Porque a través del dinero puedes contratar a empleados que te pueden generar ingresos mientras tú “duermes”.

En el mundo moderno, sin embargo, existen otras maneras de generar ingresos pasivos.

El código, los algoritmos, los medios de comunicación y las redes sociales son las más comunes; todas son formas de apalancamiento con cero costos marginales.

El dinero, por supuesto, no crece en los árboles y las buenas ideas toman tiempo.

Por eso, la visión a largo plazo y la mejora continua son fundamentales para la creación de riqueza. Los verdaderos retornos se dan a través del interés compuesto, el que se va sumando al capital inicial y sobre el que se van generando nuevos intereses.

¿Riqueza = estatus?

Una asociación común, pero equivocada, es confundir la riqueza con el estatus.

En realidad son conceptos muy distintos entre sí, pues el estatus no es más que la posición jerárquica que uno ocupa en la sociedad.

Pocas veces tiene que ver con la riqueza, ya que generalmente se gana estatus al destruirla; es decir, al “gastar”. Las apariencias engañan.

Como dice el conocido inversionista y escritor Robert Kiyosaki, “Los ricos invierten su dinero y gastan lo que les queda; los pobres gastan su dinero e invierten lo que les queda.” 

Fuente: Forbes México

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