El storytelling va más allá de contar cuentos, implica más cosas y algo muy importante es que tu historia debe ser capaz de motivar a las demás personas a que hagan cosas importantes o que sigan consejos.

Los storytelling son formas de llegar a las personas, en el caso de las empresas pueden servir para difundir una marca, producto o su visión, por ese motivo es importante conocer de qué se tratan y cómo hacer que triunfen en función de tu empresa.

Querer hacer un storytelling implica muchas más cosas que tener una idea, en primer lugar se debe saber cómo trabajarla para que la misma pueda aterrizar de manera correcta. Además de eso se debe tener en cuenta que, aunque formen parte de la misma empresa o marca no todos los storytelling van a funcionar. Para hacer que funcionen debes lograr transmitir los objetivos, visión de tu empresa y que las personas puedan captarla de la mejor manera posible.

Cuenta historias motivadoras

Un storytelling debe motivar a las personas a realizar algo, reflexionar o pensar en un tema en concreto. Una buena forma de llegar a los consumidores es transmitir historias conmovedoras. Un ejemplo es, un vídeo donde se muestre un grupo de chicos viajando, acampando en un bosque. Lo que se transmite es la aventura, la unión entre las personas y la convivencia, mientras que al mismo tiempo se intenta vender la tienda de acampar.

Para que tu storytelling deje de ser un cuento y se convierta en algo inspirador y que llegue a las personas, debes tener en cuenta que tienes que convertirte en un narrador íntegro y al mismo tiempo lograr que tu audiencia conecte con tu historia y sus personajes. Para lograrlo debes orientar tu mensaje hacia la audiencia específica a la que quieres llegar, tener un guion, preparar los mensajes o acciones motivadoras que vas a mostrar y tener a los personajes adecuados. Es importante que intentes plantear una solución u opción hacia algún problema que exista en el sector del público al que deseas llegar.

Fuente: Forbes

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