Los emprendimientos sociales se definen como una fusión: entre una solución innovadora a un problema socioeconómico y una estrategia sostenible con impacto medido.  Este tipos de negocios no se etiquetan en la típica empresa privada ni su lógica encaja en el paradigma de las empresas públicas. Estas no se denominan una organización con ánimo de lucro, dado a que presentan actividades empresariales para solucionar un problema social.

Detrás de los emprendimientos sociales existen un tipo de personas. El programa de emprendimiento e innovación social, ChileCree, destaca las cualidades de este tipo de empresarios, como la pasión por los temas sociales, que es una de las características de este tipo de emprendedores. (Lee también: ¿Cómo ser un emprendedor social?).

Los empresarios detrás de los emprendimientos sociales también se apasionan por una misión de cambio social, el dinero no les atrae por completo. Entre otros aspectos, además, son estratégicos –común en todo tipo de emprendedores- e ingeniosos, y todo en el ámbito social. (Lee también: Emprendimientos africanos: conoce 5 startups del continente).

Emprendimientos sociales alrededor del mundo

emprendimientos sociales

  • L’Olivera es un emprendimiento catalán ubicado en Valbona de les Monges. Nació en 1974 y producen alrededor de 17 tipos distintos de vinos y cinco aceites diferentes. Esta empresa logra promover socialmente a personas con discapacidades psíquicas y en riesgo de exclusión, empleando así, a alrededor de 70 personas dentro del viñedo.
  • Existen diferentes tipos de emprendimientos sociales, entre ellas encontramos a Encore.Org, una organización no lucrativa. Por lo tanto, su financiación se origina de donaciones de personas, empresas, instituciones estatales y organizaciones de todo tipo. Fue fundada en 1997, San Francisco (E.U.A.), con el fin de encontrar trabajo para la llamada generación baby boomer, aquella parte de la población que tiene entre 55 y 65 años (casi un 24% de la población total de los Estados Unidos).
  • Debajo de Estados Unidos, México, encontramos Fábrica Social. Este emprendimiento social fue creado en el 2007 y revaloriza el oficio tradicional de tejedoras y bordadoras, brindándoles empleo a más de 150 mujeres indígenas de cinco estados. El producto es vendido en dos puntos en México D.F., que ha enviado desde el Museo de Arte Moderno de Nueva York hasta Japón.
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