En publicaciones pasadas vimos que para comprar franquicias en Ecuador no hay que ser millonario. Las franquicias internacionales son, generalmente, los nichos más acechados por aquellos emprendedores que buscan replicar estos modelos de negocios exitosos en el país. Pero, ¿qué hay de las franquicias nacionales? ¿Cómo saber si un determinado local es franquiciable?
Según la Asociación Ecuatoriana de Franquicias (Asofranquicias), solo el 14% de las 152 marcas franquiciadas en el país son ecuatorianas, y entre ellas, la más exitosa es Sweet & Coffee. ¿Cómo se logra esto? Expertos en el área tienen sus puntos de vistas.
Uno de ellos es Alejandro López, Gerente Comercial de la aceleradora de franquicias Feher and Feher, quien indica que una de las reglas para que un negocio sea franquiciable es que tenga “dos sucursales operando en el mercado por tres años o tres sucursales operando por dos años”.
El portal CNN Expansión y el portal Soy Entrepreneur detallan un listado de condiciones para saber si un negocio es franquiciable o no. Si tu emprendimiento encaja en los siguientes requisitos, ya estás listos para franquiciar.
Condiciones para saber si un negocio es franquiciable
Innovador. El atributo diferenciador de toda marca en el mercado actual es la innovación. Ya no basta con tener un servicio de calidad o un buen producto; si tu servicio no se diferencia del resto, la competencia acechará el negocio.
Rentabilidad. Los inversionistas quieren saber qué tan rentable es tu negocio para saber si vale la pena franquiciarlo. Y uno puede saber aquello con los resultados que brindan las sucursales de la empresa.
Demanda adecuada. El producto o servicio que ofrezcas en tu negocio debe tener un mercado suficiente para franquiciarlo. De lo contrario, si tu negocio compite en un mercado inestable, la rentabilidad del negocio puede disminuir.
¿Alguien se ha interesado en replicar tu negocio? Si hay personas interesadas en emprender un negocio igual al tuyo, significa que existe un mercado potencial para franquiciarlo.
Buen franquiciador. El negocio en sí no bastará si el dueño (o los dueños del negocio) no se presenta como un profesional responsable de lo que hace. El éxito de una franquicia depende bastante de la relación franquiciante-franquiciatario.