Donald Trump amenaza con represalias por la multa contra Google y tales represalias podrían traducirse en la imposición de aranceles adicionales a los países de la UE.
La última y multimillonaria multa de la Comisión Europea contra Google ha sentado a cuerno quemado a Donald Trump, que se ha apresurado a amenazar al Ejecutivo comunitario con aranceles adicionales después de que Bruselas sancionara el pasado viernes a la compañía de Mountain View con 2.950 millones de dólares por considerar que favorecía a sus propios servicios publicitarios en detrimento de las ofertas de otros proveedores.
El último ataque de la Comisión Europea contra Google, que ha anunciado ya su intención de apelar la multa de Bruselas, ha soliviantado sobremanera al presidente de Estados Unidos Donald Trump, que en la red social Truth Social califica de «muy injusta» la sanción de la discordia y amenaza sin ambages con represalias que podrían traducirse en último término en la imposición de aranceles adicionales a los países de la Unión Europea.
En un post publicado en Truth Social el presidente Trump se lamenta de que la multa impuesta el viernes a Google sea el último golpe de la Comisión Europea contra «una gran empresa estadounidense». No es, en vano, la primera vez que las autoridades comunitarias imponen cuantiosas multas a compañías radicadas en Estados Unidos del ramo «techie», a las que la Comisión Europea tiene en la mirilla desde hace tiempo por saltarse a la torera las normas comunitarias.
Trump podría imponer aranceles adicionales a la Unión Europea como represalia por la multa contra Google
Donald Trump insiste en que no tolerará una sanción que tilda de medida de naturaleza discriminatoria contra una compañía estadounidense. Y no solo eso. El mandatario estadounidense se guarda bajo la manga el as de una eventual venganza contra Bruselas. Trump asegura que, a la luz de nueva y multimillonaria multa contra Google, podría verse obligado a imponer nuevos aranceles a la Unión Europea si se sigue castigando con sanciones económicas a compañías afincadas en Estados Unidos. El presidente Trump se refiere específicamente a la apertura de una investigación en virtud de lo previsto por el artículo 301 de la Ley de Comercio de Estados Unidos, que permite la imposición de aranceles a países extranjeros en respuesta a prácticas comerciales injustas.
El objetivo de la aplicación del artículo 301 de la Ley de Comercio vigente allende los mares sería «la retirada de sanciones injustas contra empresas estadounidenses que pagan impuestos en la Unión Europea», dice Trump.
Estados Unidos y la Unión Europea llegaron el pasado mes de julio a un acuerdo sobre los aranceles cuyos detalles no han sido aún ultimados. En virtud de ese acuerdo, los países de la Unión Europea se avinieron al pago de unos aranceles del 15% sobre los productos europeos importados a Estados Unidos.
Conviene, por otra parte, hacer notar que, aunque Trump ha sacado ahora la cara por Google y está dispuesto incluso a imponer nuevos aranceles a la Unión Europea para defender los intereses del gigante de internet en el viejo continente, su propio Gobierno ha tomado medidas recientemente contra la compañía a través de los tribunales para resquebrajar su monopolio en el universo de las búsquedas.































