Entrevistamos a Nil Ojeda para conocer cómo ha sido liderar creativamente el lanzamiento de Beefeater&Lemon junto a su comunidad.

En una apuesta por la autenticidad, la creatividad colaborativa y la conexión con las nuevas generaciones, Beefeater ha lanzado su nueva bebida lista para tomar: Beefeater&Lemon, una ginebra con limón que nace no sólo como un producto, sino como una expresión artística y cultural. Al frente de esta campaña se encuentra el creador de contenido Nil Ojeda, que debuta como director creativo, y el artista plástico Miguel Caravaca, responsable del diseño de la lata en una edición limitada.

Desde MarketingDirecto.com hemos hablado con ambos para conectar desde dentro cómo se llevó a cabo el desarrollo de este proyecto único, que mezcla arte, comunidad y cultura digital.

La visión de Nil: de creador de contenido a alma creativa

«Me gustó muchísimo que confiaran en mí no solo como influencer, sino como creativo. Es un reto muy distinto a lo que suelo hacer, pero lo disfruté desde el primer momento», cuenta Nil. Su entusiasmo fue inmediato: «Dije que sí sin pensarlo. Que te den la posibilidad de participar desde dentro cambia todo: las ideas fluyen, se nota más orgánico y la gente lo percibe como algo tuyo».

Lejos de limitarse a ser la cara visible de una campaña, Nil asumió el reto de liderar creativamente todo el proceso. «Agradezco muchísimo que hayan puesto en valor mi visión y creatividad más allá de mi papel como creador de contenido», afirma.

Con total libertad para llevar a cabo su idea, Nil no dudó en apoyarse en su comunidad. Compartió con ellos cada paso, desde las ideas iniciales hasta el diseño final. «Creo que eso la comunidad también lo nota, que todo es más orgánico y lleva más tu esencia. Se recibe mejor porque es algo verdaderamente tuyo», añade.

Su enfoque se posicionó muy en sintonía con lo que espera su generación: autenticidad, sencillez y una dosis de imaginación que rompa con lo convencional. «Hacemos cosas que parecen imposibles y las llevamos a cabo. Eso ayuda a que la gente se interese», explica Nil. Su mantra para lograr campañas virales es claro: «No hay más secreto que ser uno mismo. La gente nota cuando algo nace de ti, y aunque sea una campaña, si es honesto, conecta».

Creatividad con propósito

El creador de contenido tiene claro que el papel de los creadores está cambiando: «Cada vez más marcas entienden que no somos solo altavoces. Somos los que mejor conocemos a nuestra audiencia. Sabemos qué les gusta y qué no. Involucrarnos en el proceso creativo es la mejor estrategia para que la campaña funcione de verdad».

A la hora de integrar su estilo con los valores de una marca tan consolidada como Beefeater, asegura que todo fluyó con naturalidad:  «Mis valores y los de Beefeater encajaban desde el principio. No hubo que forzar nada. Solo pensar: ‘¿Qué nos gustaría recibir a nosotros como consumidores?’».

El diseño de la nueva Beefeater&Lemon

Para convertir esa visión planteada en algo único, Nil confió en el arte de Miguel Caravaca, un creador visual con un estilo urbano y vibrante que ha sabido trasladar su lenguaje al universo de la marca sin perder identidad. El resultado es un diseño de lata lleno de símbolos personales, color y actitud.

«A pesar de que sea una colaboración y estás adaptándote a una marca, quiero que se reconozca el lenguaje artístico que manejo», nos explica Caravaca. «Que cuando veas la lata digas: ‘Eso es un Caravaca’».

La pieza final parte de una reinterpretación artística en el propio estudio del artista y se traslada a la superficie de la lata, con un fondo amarillo vibrante, trazos enérgicos y mensajes clave como «Stay Busy«, el lema tatuado de Nil. También aparecen sus perros teckel, Rita y Trueno, un maletín con el número «21» y referencias visuales a Londres y Beefeater, como la frase «God Save the Gin«.

Pero más allá del impacto visual, Caravaca fue un paso más allá incorporando un componente olfativo a su obra. «Busqué despertar todos los sentidos, y la fragancia es parte de esa experiencia», comenta. La fragancia mezcla notas cítricas de yuzu japonés con un corazón de Iso E Super y una base de pachuli, lirio y regaliz negro.

Una conexión creativa

Nil y Miguel encontraron sintonía desde el primer momento: «Trabajar con Nil ha sido un placer absoluto», afirma el artista. «Es una persona muy observadora. Está ahí mirando, viendo lo que dices… y luego lo procesa todo con calma. Aporta ideas que se nota que están muy meditadas. Eso, hoy en día, es de agradecer».

Por su parte, Nil también compartió su admiración por Miguel, destacando que esta colaboración ayudó a materializar ideas que, en principio, parecían imposibles. «Miguel ha sabido llevar toda esta locura a un diseño brutal. Ha conseguido plasmar cada idea que se nos pasaba por la cabeza, lo ha hecho todavía más especial».

Esta buena combinación creativa es, en parte, lo que hace que esta campaña funcione, y es que, no solo ha logrado conectar con el público, sino que se percibe como una propuesta sincera. «Mi forma de hacer las cosas y los valores de la marca son muy parecidos; así que todo fluyó desde el principio», apunta Nil.

El gran lanzamiento de Beefeater&Lemon con Nil Ojeda y Miguel Caravaca

El gran drop se llevó a cabo el pasado 9 de julio en un evento clandestino celebrado en el Club Malasaña, reconvertido por un día en una frutería pop-up. Siguiendo la narrativa gamificada propia de Nil Ojeda, solo quienes descifraron las pistas compartidas en redes pudieron asistir y conseguir una de las 200 latas exclusivas.

Con este lanzamiento, Beefeater reafirma su apuesta por la innovación, no solo en el producto, sino en la forma de contarlo. Por su parte, Nil lo resume: «Ha sido un reto muy guay y diferente. Poder ser director creativo de Beefeater y crear la campaña con ayuda de mi comunidad ha sido una experiencia que he disfrutado muchísimo».





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