Elon Musk ha anunciado en la red social X que se apartará del rol que ha desempeñado hasta ahora al frente del Departamento de Eficiencia Gubernamental de Estados Unidos (DOGE).
Desde hace tiempo resultaba evidente que Elon Musk, el que fuera otrora fiel escudero de Donald Trump, no sentía demasiado cómodo en el Gobierno de Estados Unidos y que su rol dentro del Ejecutivo estaba además perjudicando severamente a empresas, en particular a Tesla, cuyas ventas han protagonizado una aparatosa caída en los múltiples meses. Y ahora el empresario sudafricano ha decidido oficializar por fin su ruptura con la Casa Blanca.
Musk ha anunciado en la red social X que se apartará del rol que ha desempeñado hasta ahora al frente del Departamento de Eficiencia Gubernamental de Estados Unidos (DOGE), creado específicamente por Trump para desmantelar la burocracia en el país norteamericano. En el post publicado en X el CEO de Tesla agradece en todo caso al presidente de Estados Unidos la oportunidad que le brindó en su día de «reducir gastos innecesarios» en las agencias gubernamentales dependientes de la Casa Blanca.
En las últimas semanas Musk se ha distanciado cada vez más del Gobierno de Estados Unidos y así lo ha dejado entrever en diferentes entrevistas. «La situación de la burocracia estadounidense es mucho peor de lo que pensaba», aseguró hace poco en declaraciones a The Washington Post. En su conversación con el diario estadounidense Musk no tuvo prurito alguno en hablar abiertamente de las feroces críticas con las que ha sido confrontado DOGE, el departamento que ha dirigido hasta la fecha, y aseguró que este se había convertido en una suerte de «chivo expiatorio para todo» allende los mares.
Desde que Trump tomara posesión como presidente de Estados Unidos en enero de este año, Musk ha liderado con puño de hierro DOGE y ha implementado severos recortes en el seno del Gobierno de Estados Unidos que se han topado de bruces con mucha resistencia institucional, con copiosas críticas e incluso con varias demandas consignadas en los tribunales.
Elon Musk se concentrará en la dirección de sus diferentes empresas tras apartarse de la Casa Blanca
Tras apartarse de la Casa Blanca, Musk tiene intención de concentrarse en su emporio empresarial, que no atraviesa por su mejor momento y cuya reputación ha terminado agrietándose en los últimos meses como consecuencia de su polémico rol en el Ejecutivo de Estados Unidos. «La gente ha estado quemando automóviles Tesla. ¿Por qué alguien haría eso?», se lamentaba Musk hace poco en una entrevista.
Su papel al frente de DOGE ha terminado pasando factura a Trump, cuya relación con el presidente Trump se ha enfriado además notablemente en las últimas semanas. En una entrevista concedida a CBS News Musk discrepaba abiertamente con el que ha sido hasta ahora su jefe a cuenta del plan presupuestario de la Casa Blanca. «Honestamente quedé muy decepcionado cuando vi el enorme gasto contemplado por ese plan. El gasto del Gobierno está aumentando en lugar de verse reducido», aseveró Musk. A juicio del multimillonario sudafricano, ese plan presupuestario no hace sino socavar el trabajo que DOGE ha estado desempeñando hasta la fecha.
El controvertido plan presupuestario de Trump, confrontado con muchas críticas tanto por parte del Partido Demócrata como por parte de algunos políticos republicanos, fue aprobado la semana pasada por el Congreso de Estados Unidos con una mayoría de un solo voto.
Según The New York Times, al enfriamiento de la relación entre Trump y Musk habría contribuido asimismo la construcción de un centro de datos de IA en Oriente Medio en el que está involucrado OpenAI, rival del empresario sudafricano en el ramo de la IA. Musk se habría lamentado en privado de ese acuerdo y habría tratado sin éxito de que xAI, su empresa de IA, fuera incluida también en el acuerdo.































