Braun se convertirá oficialmente en el nuevo CEO de Coca-Cola el próximo 31 de marzo. Por su parte, Quincey no se desvinculará por completo de la compañía y pasará a desempeñar la posición de presidente ejecutivo.
En un momento en que Coca-Cola está recalibrando sus estrategias para adaptarse a los nuevos hábitos desplegados por el consumidor (mucho más presto que antes a consumir alimentos y bebidas saludables), la multinacional radicada en Atlanta ha elegido al ejecutivo que reemplazará su actual CEO James Quincey. Y la persona a la que Coca-Cola ha decidido encomendar la tarea de tomar el relevo de Quincey es Henrique Braun, que desempeña actualmente el cargo de COO en el seno del fabricante de bebidas refrescantes.
Henrique Braun, que tiene 57 años y es de origen brasileño-estadounidense, es un ejecutivo muy veterano dentro de Coca-Cola. El nuevo CEO de la compañía estadounidense unió sus designios profesionales a los de Coca-Cola en 1996 (el mismo año en que James Quincey inició su trayectoria profesional en la multinacional) y desde entonces ha desempeñado allí diferentes cargos de responsabilidad.
Braun se convertirá oficialmente en el nuevo CEO de Coca-Cola el próximo 31 de marzo. Por su parte, Quincey no se desvinculará por completo de la compañía y pasará a desempeñar la posición de presidente ejecutivo.
El próximo CEO de Coca-Cola fue nombrado COO de la multinacional en enero de este año y antes de asumir este cargo trabajó en diferentes departamentos dentro de la compañía (cadena de suministro, nuevo desarrollo de negocio y embotellado, entre otros).
«Me centraré en mantener el impulso que hemos generado en los últimos años con nuestro sistema. Y trabajaremos activamente para impulsar el crecimiento en el futuro en colaboración con nuestras empresas embotelladoras», señala Braun.
Coca-Cola está otorgando cada vez más protagonismo a las bebidas sin azúcar y bajas en calorías
En los últimos años Coca-Cola ha redoblado su apuesta por las bebidas sin azúcar y bajas en calorías y ha añadido asimismo a su porfolio mediante diferentes adquisiciones nuevos productos como la leche, el agua con gas, el café y las bebidas energéticas. Gracias a esta estrategia, que ha resultado de probada eficacia, Coca-Cola ha logrado mantener en un nivel óptimo las ventas en un momento en el que ciernen negros nubarrones sobre el consumo por el efecto de los aranceles de Donald Trump, que se han traducido en conspicuas subidas de los precios allende los mares.
Desde que James Quincey se pusiera al timón de Coca-Cola en mayo de 2017, el valor de los títulos de la compañía en los parqués bursátiles se ha disparado casi un 63%.
En su Estados Unidos natal Coca-Cola afronta actualmente una regulación más severa cuyos efectos la compañía está consiguiendo aplacar mediante el lanzamiento de nuevos productos. La compañía lanzará, por ejemplo, próximamente en Estados Unidos una nueva versión de Coca-Cola endulzada con azúcar de caña que se comercializará en botellas de cristal.
No obstante, y pese a que el lanzamiento de nuevos productos y la apuesta por las bebidas sin azúcar está obrando un efecto benéfico en Coca-Cola, en algunos mercados (India y China, por ejemplo) la demanda de las bebidas refrescantes de la marca se está resintiendo por la popularidad al alza de productos locales.
Henrique Braun ha desempeñado previamente el cargo de presidente de Coca-Cola en Brasil, China y Corea del Sur y antes de su asumir el puesto de COO fue Presidente de Desarrollo Internacional dentro de la compañía.































