Anunciada en diciembre de 2024, la fusión de Omnicom e IPG superó el último obstáculo regulatorio este lunes, cuando la Comisión Europea dio luz verde a la operación.
Casi un año después de que se anunciara transacción, y una vez vencidos los últimos escollos regulatorios, Omnicom ha completado oficialmente la adquisición de Interpublic Group (IPG) por 13.500 millones de dólares para crear el mayor «holding publicitario del mundo por volumen de facturación.
En virtud del acuerdo sellado por ambas partes, los accionistas de Omnicom tendrán el control del 60,6% de la cotización bursátil de la nueva empresa resultante de la fusión, mientras que los accionistas de IPG detentarán el 39,4% restante. La facturación combinada de Omnicom e IPG ascendió a los 26.000 millones de dólares en 2024, por lo que la compañía resultante de la unión se encaramará a la cúspide de la industria publicitaria, dejando atrás a rivales como WPP y Publicis Groupe, que se ufanaba el año pasado de ser el primer grupo publicitario por volumen de facturación.
John Wren será el presidente y CEO de la nueva empresa resultante de la fusión, Phil Angelastro retendrá el cargo de EVP y CFO, mientras que Philippe Krakowsky, que ha sido hasta ahora CEO de IPG, será junto a Daryl Simm copresidente y COO de la nueva compañía, que conservará la denominación del comprador y se llamará Omnicom.
«Es un momento decisivo para nuestra compañía y para nuestra industria», subraya John Wren, presidente y CEO de Omnicom, en un comunicado. «Con la formalización del acuerdo Omnicom establece un nuevo estándar para el liderazgo moderno en marketing y ventas, creando marcas más sólidas, ofreciendo resultados superiores de negocio e impulsando un crecimiento sostenible. Estamos muy ilusionadoS con este nuevo capítulo. Quiero dar las gracias a toda nuestra gente, a nuestros clientes y a nuestros accionistas por la confianza que han depositado en nosotros», recalca.
Un titán con una facturación anual combinada de más de 26.000 millones de dólares
Anunciada en diciembre de 2024, la transacción superó el último obstáculo regulatorio este lunes, cuando la Comisión Europea dio luz verde a la operación. En septiembre la fusión obtuvo asimismo el plácet de la Comisión Federal de Comercio (FTC) de Estados Unidos, que dio su bendición a la operación, pero incluyó una cláusula en virtud de la cual la empresa resultante de la fusión de Omnicom e IPG tendría terminantemente prohibido involucrarse en boicots publicitarios motivados por razones políticas.
La suma de los activos de Omnicom e IPG transformará por completo el ecosistema publicitario. No es, por cierto, la primera vez que Omnicom explora una transacción de estas características, pues en 2013 el «holding» neoyorkino y Publicis Groupe quisieron sacar adelante una fusión entre iguales que terminaría, no obstante, naufragando por desacuerdos en cuanto liderazgo.
Mediante la adquisición de IPG Omnicom amplía sustancialmente sus capacidades en el ámbito de la tecnología y los datos para poder prestar así un mejor servicio a sus clientes en las diferentes etapas del «funnel».
Omnicom estima que su unión con IPG se traducirá en un ahorro de 750 millones de dólares. Durante los nueve primeros meses de 2025 IPG ha recortado 3.200 puestos de trabajo en todo el mundo. Y a finales de 2024 Omnicom destruyó asimismo 3.000 empleos.
John Wren ha enfatizado en varias ocasiones que su intención en mantener intactos los equipos consagrados a la atención al cliente y que los roles de naturaleza administrativa son los más susceptibles de verse afectados por eventuales recortes.
Sobre la nueva empresa fruto de la unión de Omnicom e IPG planea no solo la sombra de eventuales despidos sino también de posibles conflictos entre clientes que a partir de ahora convivirán bajo el mismo techo. La compañía presta, por ejemplo, sus servicios de manera simultánea a feroces rivales en el ámbito de las telecomunicaciones como AT&T y T-Mobile y también a State Farm y GEICO, que compiten de manera directa en el ramo de los seguros. En el aire está asimismo el futuro de las diferentes agencias de la constelación de Omnicom e IPG, ya que es probable que no todas sobrevivan como marcas independientes.































